¿Asombro? Asombro, ¿de qué?

Naukas

Cosmos

La riqueza del Cosmos lo supera todo: riqueza en hechos elegantes, en exquisitas interrelaciones, en la maquinaria sutil del asombro.

Esta frase, que aparece en el capítulo primero de “Cosmos” de Carl Sagan, ejemplifica un sentimiento que ha sido expresado de una u otra manera por pensadores tan dispares como Leibniz, Schopenhauer, Wittgenstein, Heidegger, Proust, Dawkins o Hawking, un sentimiento con el que se ha sentido identificado prácticamente cualquier filósofo, científico o teólogo contemporáneo, o cualquier aficionado a la ciencia o cualquier persona reflexiva: el asombro y fascinación ante la mera existencia del universo y su funcionamiento tal y como lo describe la ciencia.

Pero, cabe preguntarse, ¿tiene sentido asombrarse ante el universo? ¿Qué raíces tiene este asombro? Esto es lo que vamos a explorar hoy, si bien ya expusimos en otra parte y puede ser complementario de lo que digamos aquí, la falacia cosmista, esa manía de referirnos al universo como “cosmos”.

Curiosamente, la frase de Sagan anterior a la que abre este artículo es “El escepticismo nos permite distinguir la fantasía de la realidad, poner a prueba nuestras especulaciones”, y ese asombro ante el universo no es más que la herencia de una fantasía religiosa. No hay que asombrarse de que el universo exista, ni maravillarse de que funcione como funciona; racionalmente, ¿por qué habríamos de hacerlo? El escepticismo nos lleva a verlo tal cual es.

El asombro comienza cuando implícitamente se considera la pregunta, ya propuesta por Leibniz, de ¿por qué existe algo en vez de nada?, esta cuestión, siguiendo a Adolf Grünbaum, la llamaremos la Pregunta Existencial Primordial (PEP).

La PEP nos puede parecer una pregunta legítima, que tiene sentido plantearse pero, como cualquier pregunta que comienza con un “por qué” está dando por supuestas algunas cosas. Supone no solo que debe existir una explicación para la existencia del universo, sino que es necesaria una explicación ya que, está implícito, si no hubiese una razón o causa la nada prevalecería. Y esto último es un prejucio: no está justificado de entrada; se asume que es así sin considerarlo detenidamente y proporcionar un razonamiento que lo justifique. Esto es lo que Grünbaum llama la Espontaneidad de la Nada (EN). La EN permea buena parte del pensamiento, incluso de los ateos más beligerantes.

Sin embargo, la EN es claramente un concepto cristiano; no judeocristiano, no, puramente cristiano. Está inspirado en la doctrina de la creatio ex nihilo, creación a partir de la nada, algo no recogido en ni en la Torá ni en el Tanaj judíos, sino creado (valga el juego de palabras) por los teólogos cristianos en el siglo segundo de la era común: si Dios es todopoderoso, no puede crear el universo a partir de materiales preexistentes, ya que ello limitaría su poder, por lo tanto lo crea de la nada. Los teólogos encontraron una oscura cita en el segundo Libro de los Macabeos (este libro deuterocanónico se considera apócrifo por judíos y protestantes, y contiene muchas de las doctrinas que distinguen al Catolicismo), y después ya en otras del Nuevo Testamento en las que apoyarse para argumentar su idea. La imagen expuesta en el Génesis en la que Dios se limita a imponer orden en el caos existente, básicamente en relación a “las aguas” que se asumen como preexistentes, pasó a ser considerada una narración mítico-poética.

Pero los teólogos no se quedaron contentos con esto y fueron un paso más allá para redondear su doctrina. Dios no solamente era el creador a partir de la nada de todo lo existente, también era el sostenedor, esto es, si Dios dejaba de actuar, todo lo existente colapsaría en la inexistencia. Esta doctrina de la dependencia ontológica de Dios que tiene el universo, el Axioma de la Dependencia (AD) de Grünbaum, tuvo una enorme influencia en racionalistas como Descartes y Leibniz, llevándoles a presuponer en sus textos que, si no fuese por Dios, nada podría seguir existiendo. Cosa similar encontramos en los Principia de Newton, donde Dios interviene continuamente para mantener a los planetas en las órbitas correctas y, como eso, todo lo demás.

Por lo tanto, la PEP se basa la suposición de la EN que, a su vez, reposa en el AD.

Resulta pues que, debido a la influencia de teólogos y filósofos (tradicionales y naturales), la PEP nos parece una cuestión legítima; y durante siglos ni se planteaba la idea, común en pensadores griegos clásicos o hindúes, por ejemplo, de que el universo no tuviese una causa. Y, sin embargo, se basa en premisas que son falsas: no existe ninguna razón objetiva por el que la Nada deba prevalecer.

La PEP, digámoslo claramente, es una pregunta trampa del estilo de ¿has dejado de pegar a tu madre?

De hecho, si se mira a la materia-energía de forma empírica, como una persona moderna de mente científica debería hacer, la consecuencia lógica es que el universo, de una forma u otra, es algo que debe existir. Maravillarse de que algo que es lógico suceda es, como mínimo, inconsistente.

Referencias:

Grünbaum, A. (1989) The pseudo-problem of creation in physical cosmology Philosophy of Science 56 (3):373-394

Holt, J. (2012) The Great Rejectionist Why Does the World Exist? Profile Books (London)

Este post ha sido realizado por César Tomé López (@EDocet) y es una colaboración de Naukas con la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU.

18 comentarios

  • Avatar de Miguel

    Buenas reflexiones. Yo creo que de lo que nos asombramos es de las cosas nuevas que descubrimos. No de que sean de un modo u otro, si no de algo que antes era desconocido y ahora no lo es. Si le dices a alguien que la Tierra gira pues se queda igual (depende de quién, claro), si le describes algún otro fenómeno físico que desconozca es cuando viene el asombro. Otra cosa son los temas religiosos.

    Canción: «Shudder before the beautiful», Nigtwish

  • Avatar de busgosu

    El asombro tiene lugar en el universo como parte de las emociones o sentimientos de los seres vivos, el asombro existe en el universo aunque solo sea la reacción de los cuerpos humanos a su entorno.
    Las emociones forman parte del universo, no se pueden despreciar en el asunto de descubrir el universo, porque seria como quitarle partes al universo. No debemos eliminarlas porque sin ellas no habría motivo para querer explorar el funcionamiento del universo.

    El universo no es una cosa separada de lo que somos, el universo como un todo, incluye todo lo que son sus partes. Diría aun más, el universo construye las partes y no las partes construyen el todo, como suele pensarse.

    La objetividad es el método empírico basado en tratan todo como objetos movidos por energía, y que a la vez es la mentalidad que considera que ese método es independiente de cualquier manera de pensar. Pero atribuir a la ‘objetividad’ esas cualidades no sucede por demostración lógica, sino por la asunción de que eso es así, lo cual es una pura subjetividad.

    El universo no tiene un causa pero si las construyes, un ejemplo son las seres vivos y su causa de permanecer vivos.

  • Avatar de Miguel

    Me encanta el trasfondo sobre la disyuntiva contingente/necesario del artículo.

    Sólo 2 aclaraciones: Descartes metió a Dios con calzador en sus teorías epistemológicas para no ganarse la enemistad de la Iglesia; y en el caso de Newton, más de lo mismo (recordemos que Galileo rehusó acatar los dictados de la Iglesia y murió bajo arresto domiciliario por ello).
    Ambos, filósofo y científico, tuvieron que incluir a Dios en sus teorías para poder publicarlas y no sufrir censura; pero realmente la figura divina no es imprescindible en ellas. Por ejemplo, Newton sabía perfectamente que los planetas podían moverse sin necesidad de un sustento divino, sólo en base a la ley de la gravedad.

  • Avatar de David

    Tu alusion a motivos religiosos es relevante pero no suficiente para deflactar la cuestion por completo como pretendes.

    La cuestion de algo vs nada (PEP) existe no exclusivamente porque la Nada sea mas probable o necesaria desde un punto de vista religioso, sino porque salvo alguna argumentacion adicional (por ejemplo, de tipo estadistico) esta al mismo nivel que el de Algo, simplemente por ser concebible.

  • Avatar de Juan

    «Maravillarse de que algo que es lógico suceda es, como mínimo, inconsistente»…
    Seguro que el autor de esta entrada es un gran divulgador y conocedor científico, pero creo que no entiendo la conclusión a la que llega. Una emoción, como la sensación de maravillarse al contemplar la naturaleza no creo que pueda juzgarse de esta manera.
    Me maravillo continuamente al observar el «cosmos», una emoción que creo que es a la que se refiere Sagan. Y para juzgar la consistencia y lógica de las emociones, si eso es posible o tiene algún sentido, creo que tenemos que esperar mucho aún a que neurocientíficos, psicólogos evolucionistas y demás nos enseñen más cosas de cómo vemos e interpretamos el mundo.
    Y en el caso de que la lógica del artículo fuera irrefutable e impecable, no tendría ningún problema en reconocer la inconsistencia de mi mentalidad respecto al universo y la ciencia, y crear una nueva religión en la que Einstein y Sagan serían mis maestros. Por fin, dejaría de ser un agnóstico.

  • Avatar de busgosu

    “De la nada se creo algo” es común en la cosmología humana, lo único que cambia es la entidad que personaliza el origen del proceso creador, y que trasforma lo que era nada en algo. Cada cultura cosmológica de la creación tiene su propio ente creador

    Por ejemplo la cultura del cristianismo tiene su Génesis creador en la entidad del personaje de Dios. Dios es pues el portador de la creación.

    Y la cultura astro-física tiene su Big-Bang creador producido por la entidad de la materia. La materia es pues la portadora de la creación, semejante al dios del Cristianismo

    Cada cultura cosmológica tienen sus propias entidades creadoras que transforman la nada en algo.

    ¿Cuando trascenderán las distintas culturas cosmologicas que debe haber un origen, y que hubo una dualidad nada-algo; que hubo un principio creador, que fue llevado acabo por la primera entidad que tubo presencia en la nada?

      • Avatar de busgosu

        ¿No sé lo que usted considera falso del comentario?, ¿y tampoco sé en base a qué razonamiento lo considera falso?. Con esta falta de información no puedo saber a que se refiere, y por consiguiente, tampoco sé encontrar los ejemplos del texto que apoyan su afirmación.

        Un saludo

          • Avatar de busgosu

            Cierto, he dicho que todas las culturas cosmológicas tienen una entidad creadora a partir de la nada. Me aventure a afirmarlo porque no conozco otras cosmologías, entendiendo como cosmológica la lógica o razón de la realidad del universo, un asunto que no está planteado en otras culturas, por ejemplo en la budista.
            Por eso distinguió que esas culturas no tienen cosmológica, porque aceptan la realidad como la perciben y no buscan una razón lógica para las manifestaciones que existen, pues su única razón para el universo es percibirlo. Según mi interpretación, la cosmología que tienen no es sobre el universo, sino sobre el ‘ser’ y sus narrativas existenciales.

  • Avatar de Charles

    La PEP no se basa en EN. Sin EN sigue habiendo PEP, lo que echa por tierra la mitad del articulo.
    Me invento (si no esta inventado ya) le ENN «Espontaneidad de la NO Nada» o EA «Espontaneidad de Algo» y PEP sigue teniendo sentido.

    Asignemosles probabilidades:
    Si EN 0% y EA 100% – No es asombroso
    Si EN 1% y EA 99% – No resulta muy asobroso que digamos,
    Si EN 99% y EA 1% – Si, es ASOMBROSO
    Si EN 100% y EA0% – No es que sea asombroso, es un puto milagro

    Como de momento, desconocemos esas probabilidades, tendrá que ser lo que cada uno crea, y de momento yo, con mi mente abierta, mis conocimientos, mi experiencia y por que yo lo valgo me quedo con el puto milagro.

    y ahora me lo discutes sin perjuicios contra la posibilidad de que la ENN deba prevalecer.

    • Avatar de busgosu

      Lo que usted cree no es el universo, pues lo que usted cree desaparece con usted.

      Luego el concepto de existir y la realidad que sólo está contenida en el ser que piensa y siente, no es la ultima realidad del universo, pues esa realidad muere con el ser, y la realidad del universo sigue funcionando aunque todos los humamos muramos.

      De comprobarse que todas la cosas que existe también desparecen, la conclusión de que la existencia de algo es la explicación del universo, carece de lógica, porque una cosa o ser que desaparece, no puede ser la realidad ultima del universo.

      La realidad última del universo o la naturaleza esencial del universo que produce todas las manifestaciones que en él ocurren, no desaparece en ninguna circunstancia del universo. Es ilógico que realidad ultima del universo sea perecedera.

      ¿Alguien sabe de algún proceso que se mantenga constante en el universo?

      Quizá la conjunción de todos los procesos de naturaleza eterna, sean la explicación de la realidad última del universo.

      Como ejemplo de proceso de naturaleza eterna, está la “interacción” pues sucede aunque toda cosa existen sea efímera.

  • […] Una cosa es sorprenderse por los hallazgos en contra del sentido común y otra elevar esta sorpresa a fascinación por el universo, al asombro del que hablaba Sagan. Eso es una muestra de antropocentrismo extremo: es elevar la sorpresa epistemológica a valor metafísico. Lo que es absurdo si sabemos como hemos evolucionado como especie (y nuestras capacidades cognitivas con ello) y que el universo tiene que existir de una manera o de otra. Este cronista entiende que hacer esta distinción puede ser muy sutil para la inmensa mayoría, pero es necesaria si se quieren conocer las cosas de forma clara y distinta (sub specie aeternitatis, que dijo el filósofo). Todo esto a cuenta de ¿Asombro? Asombro, ¿de qué? […]

  • Avatar de georges m.

    Un desarrollo del tema tratado bien estructurado, no obstante podemos aportar algún anexo, el asombro es una experiencia subjetiva que inicia un proceso mental de examen y analítica de un algo que ha suscitado nuestra atención. La sensación es anterior a la percepción, si consideramos esta última como la interpretación de ello, la experiencia subjetiva comporta innumerables connotaciones tantas como el número de personas que la experimentan. Abreviaré para no ser molesto, hacer cualquier cosa es experimentar nuestra subjetividad con sus peculiaridades específicas, por ello el asombro, tiene sus negatividades porque se acomoda en uno de los extremos de la percepción, tenemos una representación que describimos e interpretamos de la experiencia que experimentamos, ello nos abre posibilidades de elección a acceder a percibir subjetivamente la realidad como algo que existe en nosotros y más allá de nosotros, por ello el asombro es una extensión de esa subjetividad siendo las necesidades de cada individuo lo que determinará la calidad y expresión de ese asombro, desarrollándose con ello las creencias, que completan las necesidades de una verdad, que siempre aunque sea una radicalización será una verdad incompleta.

    • Avatar de georges m.

      Lo que expresa es correcto. Es una extensión más elaborada de lo que ya percibió en sus inicios uno de los presocráticos –Parménides-, su confianza en la razón aunque sus sentidos experimentaran algo diferente, ello se asentó con los filósofos posteriores y con la consolidación del método científico. El asombro visto desde esta perspectiva podría ser más un obstáculo, no obstante también podemos interpretarlo como un mediador, entre la razón y la experiencia subjetiva.

  • Avatar de Asier

    Interesante artículo, pero algunas cosas me chirrían. Del texto se infiere que la PEP sólo es posible formularla desde un contexto filosófico-teológico cristiano. Me surgen dos dudas:
    Primera duda: ¿La escuela eleática (Parménides, Zenón) no anticipó ya dicha pregunta con su oposición Ser/Nada (No Ser)?
    Segunda duda: ¿Por qué se da por hecho que la Pregunta Existencial Primordial es la formulación leibniziana (y heideggeriana) de «por qué existe algo en vez de nada», y no otras intuitivamente más sencillas a mi parecer como la aristotélica «por qué lo que existe existe así y no de otra manera»? Si se establece que el asombro procede de la PEP y se escoge como PEP una pregunta tan preñada de teología agustiniana como la escogida en el artículo, es fácil concluir que si nos asombramos ante el universo es porque no nos hemos desprendido de prejuicios irracionales de raíz cristiana. Me parece ver una petición de principio ahí. Y por otra parte, ¿acaso los griegos no se asombraban ante el cosmos?¿No podemos asombrarnos porque «las cosas sean así y no de otra manera»?

  • Avatar de Masgüel

    «si se mira a la materia-energía de forma empírica, como una persona moderna de mente científica debería hacer, la consecuencia lógica es que el universo, de una forma u otra, es algo que debe existir.»

    ¿Por qué?.

    «Maravillarse de que algo que es lógico suceda es, como mínimo, inconsistente.»

    ¿Por qué?.

    «Una cosa es sorprenderse por los hallazgos en contra del sentido común y otra elevar esta sorpresa a fascinación por el universo, al asombro del que hablaba Sagan. Eso es una muestra de antropocentrismo extremo»

    Los seres humanos son (que sepamos) los únicos bichos capaces de maravillarse. El antropocentrismo está justificado si hablamos de un fenómeno exclusivamente humano.

    «es elevar la sorpresa epistemológica a valor metafísico.»

    ¿Por qué?.

    Gracias.

    • Avatar de busgosu

      Usted dijo : “si se mira a la materia-energía de forma empírica, como una persona moderna de mente científica debería hacer, la consecuencia lógica es que el universo, de una forma u otra, es algo que debe existir.”
      ¿Por qué?.

      Porque así se forma un pensamiento independiente de la condición confusa y arbitraria de las emociones. Es sentar una base del pensamiento para deshacerse de las interpretaciones de índole personal que viene de las emociones propias, y totalmente subjetivas.

      Sin embargo esta objetividad sigue perteneciendo al conjunto de la mente, del sistema corporal de percepción y la estructura básica que compone el cuerpo.
      (en analogía con un ordenador, la mente sería el software, el sistema de percepción sería los periféricos de entrada y salida de datos, y la estructura básica sería el hardware).
      Porque aunque nos limitemos a ser meros observadores de mente fría, el observador continua siendo el sistema formado por la mente, la percepción y el cuerpo, o sistema paradigmático MPC . Que también significa que el observador es el universo, o expresado de otra manera:
      El observador es el agujero negro que se traga el universo para reducirlo a un horizonte de sucesos en torno a él.

      Mi primera reflexión para ver más allá del sistema Mente, Percepción y Cuerpo, o sistema paradigmático MPC.

      Reconocer que todos somos y venimos de serie con el sistema MPC, pues poco se puede hacer para ver más allá, con los individuos que lo niegan, o creen tener un método de análisis que bien aplicado es objetivo e independiente de interpretaciones subjetivas.
      Esto es falso porque el método de análisis parte de unos principios axiomáticos, que se asumen como afirmaciones evidentes sin demostración, desde los cuales se arma la lógica del método. Ésos axiomas son normales en la concepción de cada humano y son comunes a todos los seres humanos, porque vienen de serie con el sistema MPC que todos somos.

      Los defensores de que no hay tal cosa como el paradigma MPC, son incapaces de explicar el origen de los principios axiomáticos de su lógica, ni siquiera lo contempla con principios lógicos sino como una realidad del mundo, sin más.

  • Avatar de Germán Fernández Sánchez

    Especioso razonamiento, plagado de argumentos de autoridad, ad hominem y otras falacias:

    «Supone no solo que debe existir una explicación para la existencia del universo, sino que es necesaria una explicación ya que, está implícito, si no hubiese una razón o causa la nada prevalecería. Y esto último es un prejucio: no está justificado de entrada; se asume que es así sin considerarlo detenidamente y proporcionar un razonamiento que lo justifique.» ¿La navaja de Ockham?

    «Sin embargo, la EN es claramente un concepto cristiano; no judeocristiano, no, puramente cristiano. Está inspirado en la doctrina de la creatio ex nihilo, creación a partir de la nada, algo no recogido en ni en la Torá ni en el Tanaj judíos, sino creado (valga el juego de palabras) por los teólogos cristianos en el siglo segundo» ad hominem

    «Los teólogos encontraron una oscura cita en el segundo Libro de los Macabeos (este libro deuterocanónico se considera apócrifo por judíos y protestantes, y contiene muchas de las doctrinas que distinguen al Catolicismo)» ad hominem

    «La imagen expuesta en el Génesis en la que Dios se limita a imponer orden en el caos existente, básicamente en relación a “las aguas” que se asumen como preexistentes, pasó a ser considerada una narración mítico-poética.» Irrelevante. ¿Te parece mal? ¿Eres partidario del literalismo bíblico?

    «Pero los teólogos no se quedaron contentos con esto y fueron un paso más allá para redondear su doctrina. Dios no solamente era el creador a partir de la nada de todo lo existente, también era el sostenedor, esto es, si Dios dejaba de actuar, todo lo existente colapsaría en la inexistencia. Esta doctrina de la dependencia ontológica de Dios que tiene el universo, el Axioma de la Dependencia (AD) […] Por lo tanto, la PEP se basa la suposición de la EN que, a su vez, reposa en el AD.» si esto no es un razonamiento circular, se le parece mucho. No hay por qué asumir toda la teología cristiana para plantearse la pregunta.

    «debido a la influencia de teólogos y filósofos (tradicionales y naturales), la PEP nos parece una cuestión legítima; y durante siglos ni se planteaba la idea, común en pensadores griegos clásicos o hindúes, por ejemplo, de que el universo no tuviese una causa» Y esto ¿qué es? ¿Un argumento de autoridad? ¿Qué insinúas, que los antiguos (griegos, hindúes) eran más sabios? La pregunta de por qué la manzana cae al suelo pero la Luna no tampoco se planteó durante siglos. ¿De verdad quieres ir por ese camino?

    En fin, una entrada decepcionante.

      • Avatar de Germán Fernández Sánchez

        No quiero embarcarme en una discusión bizantina, pero permítame el autor hacer unas puntualizaciones:

        1) Yo no estoy argumentando nada. Es el autor el que trata de demostrar que la PEP es una pregunta trampa. Yo me limito a señalar las debilidades (a mi juicio) de sus argumentos.

        2) Quizá sea el autor quien tiene que repasar el concepto de «ad hóminem». Cuando dice «el argumento del texto es que la PEP es una pregunta trampa que tiene su origen en la teología cristianaEso es un argumento ad hóminem*. Sobre todo, porque la mayor parte del texto está dedicada a explicitar y recalcar el origen exclusivamente cristiano de la Pregunta, y no a criticar la validez de la Pregunta en sí. Pero que la Pregunta tenga su origen en la teología cristiana es irrelavante. Y que, según la teología cristiana, la Pregunta se base en el Axioma de la Dependencia es absolutamente irrelevante. La Pregunta se puede formular, digo yo, al margen de la teología cristiana. No tiene copyright.

        * Por si acaso, me refiero a esto:

        3) En ningún momento se explica por qué la Pregunta es una trampa. ¿Que da por supuestas algunas cosas? ¡Nos ha jodido! La pregunta de por qué un cuerpo negro en equilibrio no emite una cantidad infinita de energía también da por supuesta la equipartición de la energía, que ahora sabemos que no se cumple precisamente porque, a pesar de todo, alguien se planteó la pregunta y buscó una solución. Pero claro, si no encuentro una respuesta que no me resulte incómoda, mejor barro la Pregunta debajo de la alfombra.

        4) Comparar la pregunta con «¿has dejado de pegar a tu madre?» no es más que una boutade, una salida de pata de banco que diría mi madre. Esta segunda pregunta presupone que alguien está pegando a su madre, cosa que no puedo constatar porque ignoro la situación familiar del autor. Sería más pertinente compararla con ¿por qué el cielo es azul, y no transparente como el aire? o ¿por qué las nubes son blancas, y no incoloras, como el agua que las forma? o, mejor aún, ¿por qué el cielo nocturno es negro, y no blanco por la luz de infinidad de estrellas? Esta última pregunta se basa en una premisa falsa, y sin embargo, ha sido una pregunta muy fecunda en la historia de la ciencia.

        5) Hablando de comprensión lectora, el autor quizá debería repasar el primer versículo del capítulo primero del Génesis, y recordar que en muchas cosmologías antiguas el Universo se dividía exclusivamente en dos partes: los cielos, perfectos e inmutables, y la tierra, cambiante y corruptible.

        Y ahora, con su permiso, voy a dejar aquí el tema y me vuelvo a seguir asombrándome y maravillándome.

  • […] La riqueza del Cosmos lo supera todo: riqueza en hechos elegantes, en exquisitas interrelaciones, en la maquinaria sutil del asombro. Esta frase, que aparece en el capítulo primero de “Cosmos” de Carl Sagan, ejemplifica un sentimiento […]

  • Avatar de Agustín Sardón

    «Pero, cabe preguntarse, ¿tiene sentido asombrarse ante el universo? ¿Qué raíces tiene este asombro?

    El asombro comienza cuando implícitamente se considera la pregunta…la llamaremos la Pregunta Existencial Primordial (PEP).

    Por lo tanto, la PEP se basa la suposición de la EN que, a su vez, reposa en el AD.»

    Resulta pues que, debido a la influencia de teólogos y filósofos…

    Me estás diciendo que antes de la teología cristiana no existía el asombro ante el universo. ¿Y tú eres la prueba del algodón? Pues pásaselo primero a tu argumentación que adolece de la falacia del «un, dos, tres, responda otra vez» que consiste en relacionar dos cosas cualesquiera por la fuerza, por ejemplo, el «asombro ante el universo» con la teología cristiana.

    «no existe ninguna razón objetiva por el que la Nada deba prevalecer.»

    Y esa no es razón para no asombrarse ante la existencia.

    «Maravillarse de que algo que es lógico suceda es, como mínimo, inconsistente.»

    Pues no, es maravilloso, porque eso supone que la lógica funciona y no tenía por qué ser así. La PEP otra vez: ¿por qué la lógica y no la ausencia de lógica?

    «»A veces creo que hay vida en otros planetas, y a veces creo que no. En cualquiera de los dos casos la conclusión es asombrosa.» Carl Sagan.

    El escepticismo moderado es bueno, pero pasarse de rosca no. Prejuicio Aristotélico.

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