La araña que atrae presas manipulando señales luminosas

Vida fascinante

Dentro del gran grupo de los arácnidos, los araneidos son los principales constructores de telarañas. Este sistema de caza plantea dos necesidades, por un lado atraer a la presa hacia la telaraña, por otro no llamar la atención de potenciales depredadores. Vamos a ver qué puede hacer una araña para “convencer” a su presa de que se deje atrapar en sus redes. Anticipo que terminaremos describiendo una estrategia realmente asombrosa que acaba de ser descubierta.

Las estrategias de atracción de presas por parte de las arañas han sido revisadas recientemente en un espléndido artículo. Por ejemplo, la telaraña puede ser decorada con hilos adicionales denominados “estabilimentos”, que reflejan la luz ultravioleta, visible para muchos insectos. Es el caso de la araña Argiope (Figura 1). Se ha demostrado experimentalmente que la presencia de estos motivos decorativos aumenta la captura de presas y evita que las aves y otros animales voladores tropiecen con la tela y la rompan. Otras arañas han desarrollado patrones llamativos de color en sus cuerpos, con bandas brillantes que también reflejan la luz UV. Es el caso de Gasteracantha (Figura 1).

Figura 1. Izquierda: estabilimento en la telaraña de Argiope trifasciata. De Sarefo, CC BY-SA 3.0. Derecha: coloración de la araña Gasteracantha cancriformis. De Mkullen, dominio público

Existen estímulos no visuales aún más sofisticados. La araña Argiope keiserlingi impregna su telaraña con putrescina, una sustancia pestilente, atrayendo a moscas que depositan sus huevos en la carroña. Mallos gregalis abandona carcasas de mosca en las que crecen hongos que producen olores atractivos para otros insectos. La araña boleadora americana (Mastophora) segrega sustancias similares a las feromonas de polillas. No contenta con ello, ha desarrollado un mecanismo para atrapar a sus presas similar a las boleadoras de los gauchos. Pueden verlo en este extraordinario vídeo:

Debemos citar un caso en el que la telaraña se convierte en trampa mortal para su constructora. La araña saltadora Portia sacude la telaraña de su víctima imitando los movimientos de una presa. Cuando la incauta propietaria se acerca imaginando que se va a dar un banquete, la Portia salta sobre ella y la devora. De nuevo, este espectacular vídeo muestra la hábil estrategia.

Pero todos estos comportamientos palidecen al lado del que acaban de describir un grupo de investigadores chinos en la revista Current Biology. La araña Araneus ventricosus atrae sus presas utilizando señales luminosas producidas por la luciérnaga Abscondita terminalis y que son hábilmente manipuladas por la araña (Figura 2).

Figura 2. Izquierda: Araneus ventricosus, la araña estudiada por los científicos chinos, devorando una presa. De KKPCW, CC BY-SA 4.0. Derecha: la luciérnaga Abscondita terminalis. De Sumanth699, CC BY-SA 4.0

Abscondita terminalis es un pequeño coleóptero volador del trópico asiático que emite luz en el abdomen. Los machos producen ráfagas rápidas e intensas de destellos en dos áreas del abdomen, mientras que las hembras emiten pulsos más espaciados y de menor intensidad en una única zona. Si una luciérnaga macho es atrapada por la red, la araña no la mata para que siga emitiendo sus señales. Estas señales producidas por un macho no servirían para atraer a las hembras, que son más sedentarias, por lo que parece que la araña no ha conseguido gran cosa. Ocurre además que la emisión de luz de la presa se hace más débil, menos frecuente y se restringe a un área única del abdomen. De esta forma las señales se asemejan algo a las que produciría una luciérnaga hembra (Figura 3).

Figura 3. Experimentos realizados por los autores del artículo de Current Biology. Cuando un macho de la luciérnaga cae en la telaraña de A. ventricosus cambia su patrón de emisión de luz, pero esto por sí solo no atrae más machos (A). Otros machos son atraídos a la telaraña si hay interacción entre la araña y la presa, haciendo las señales más “femeninas” (B). Si se tapan las señales con tinta, la presencia de la araña tampoco provoca que otros machos sean atraídos (C). Se han utilizado imágenes Freepik de brgfx y Tom, dominio público

Los investigadores chinos comprobaron experimentalmente que se producían estos cambios en las señales luminosas de la luciérnaga atrapada, pero solo si la araña estaba presente se lograba una mayor eficiencia en la captura de presas. La interacción de la araña con la presa producía señales más “femeninas” en cuanto a duración y periodo del pulso luminoso, señales que resultaban más atractivas para otros machos. De hecho, si se oscurecía con tinta el abdomen de la luciérnaga, no se producía la atracción de nuevos machos hacia la telaraña aunque la araña estuviera presente (Figura 3).

¿Cómo manipula la araña a su presa para hacerle cambiar su código de señales? Esto no ha podido ser elucidado, pero los investigadores piensan que puede ser a consecuencia directa de la mordedura de la araña, o por la inyección de alguna toxina que interfiere con el control de la señal luminosa. Conocer este mecanismo debería ser una prioridad en el futuro cercano.

Se trata de un caso excepcional por varias razones, en primer lugar por la utilización de señales luminosas como señuelos, y sobre todo por la astuta manipulación de dichas señales para que mimeticen a las emitidas por las hembras. También es sorprendente que el comportamiento de la araña se asemeje a lo que en psicología humana se conoce como gratificación aplazada o recompensa diferida. Esto consiste en la renuncia voluntaria a un beneficio inmediato (devorar la primera presa capturada) con la expectativa de una mayor recompensa en el futuro (un mayor número de presas). La gratificación aplazada se ha estudiado mucho en humanos, y existen algunas evidencias de este comportamiento en animales vertebrados, desde peces hasta primates. Nos podemos preguntar cómo ha podido evolucionar una estrategia como la que hemos descrito en un animal con un sistema nervioso mucho más sencillo.

Referencias:

Fu, X., Yu, L., Zhou, W., et al. (2024). Spiders manipulate and exploit bioluminescent signals of fireflies. Curr. Biol. doi: 10.1016/j.cub.2024.07.011.

Ratz, T., Bourdiol, J., Moreau, S., et al. (2023). The evolution of prey-attraction strategies in spiders: the interplay between foraging and predator avoidance. Oecologia. doi: 10.1007/s00442-023-05427-5. E

Sobre el autor: Ramón Muñoz-Chápuli Oriol es Catedrático de Biología Animal (jubilado) de la Universidad de Málaga

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